EL DÉFICIT PERMANENTE Y ELEVADO ATENTA CONTRA EL CRECIMIENTO “EN SERIO”. Hace ocho años que Argentina está inmersa en una estanflación cuyo origen es la mala política fiscal. A medida que se acumulan déficit fiscales crecientes, el estancamiento y el proceso inflacionario tienden a profundizarse. Esta situación se agrava al observar que es un comportamiento sistemático que ya tiene más de 50 años. De esta manera, se busca financiamiento alternativo con impuesto inflacionario (emisión monetaria “de más”) y/o deuda generando pérdida del PBI per cápita.